El lugar de celebración de la comunión
Si tenemos suficiente espacio, podemos celebrar la recepción en nuestra propia casa. No dudes de que esto suponga más trabajo para la familia, pero será una opción más barata y le dará un toque más íntimo. Si en cambio se decide celebrar fuera de casa, un espacio amplio o incluso al aire libre será una opción preciosa (estaremos atentos a la previsiones del tiempo). De esta forma los niños podrán jugar animadamente.
La mesa de dulces o Candy Bar para la comunión
Esta mesa llena de golosinas y pastelitos es muy popular. No solo porque puede mantener entretenidos a los niños (y no tan niños), sino también porque su decoración suele ser tan dulce como su mismo contenido. La gracia es que todos los dulces sean fácilmente accesibles y a la vista de todos. Así que lo mejor para presentarlos serían bandejas de diferentes pisos para los pasteles y tarros de cristal (transparentes). Además de los dulces, podemos añadir pequeños cartelitos con el nombre de nuestro pequeño o con la descripción de los diferentes dulces. Como la mesa será visitada por niños debemos evitar fuentes de fuego como velas. Si queremos añadir un toque de luz es mejor optar por LEDs. Unas jaulas decorativas también son una opción muy popular para decorar las mesas de dulces, ya que recuerdan a la primavera.
La decoración de la mesa del comulgante
La decoración de la mesa no tiene que ser tan espectacular como la Candy bar, pero también necesita dedicación y debe conjuntar con la decoración global del espacio y, por lo tanto, también con la mesa de dulces. Existen múltiples centros de mesa para adornar el espacio, también podemos dejar un toque en cada plato, como unos bonitos anillos de servilletas con el nombre del niño y la fecha. Para indicar dónde se debe sentar cada uno también podemos contar con pequeños carteles con los nombres de cada uno.
Los recordatorios y detalles para los invitados de comunión
Para que todos los asistentes (y aquellos que no han podido venir) recuerden para siempre la primera comunión del niño, se les entrega un pequeño recordatorio en forma de carta. Por supuesto, existen opciones 100% personalizables con el nombre del niño, la fecha y el diseño que más guste. De la misma forma podemos entregar pequeños detalles para los invitados. Los regalos comestibles son muy populares por su originalidad y uso. Podemos preparar unos bombones en una caja bonita o galletas con diseño personalizado.
El libro de firmas de comunión
Igual que los invitados, también la familia se merece un recordatorio especial de aquel día. Más allá de las fotos y los regalos, un libro de firmas donde los invitados pueden dejarle al niño y sus padres sus más bonitas dedicatorias es un regalo para toda la vida.
¿Ya está todo planeado? Entonces sólo falta enviar...
Las invitaciones para la primera comunión
Un punto importantísimo. También existen muchísimas opciones de crear y enviar las invitaciones personalizadas para este acto tan especial, que seguramente harán que todos querrán asistir y compartir el día con la familia.
Ya veis que lo más importante es planificar bien y no ponernos nerviosos. Que este día tan especial también es para los padres.
